Fuente: https://www.fundacionarticular.org/es/patologias/artrosis
La artrosis es una enfermedad crónica degenerativa, caraterizada por destruir progresivamente el cartílago articular. Suele afectar a personas de mas de 50 años y está íntimamente relacionada con el sobrepeso y el sedentarismo(1). Suele cursar con dolor o rigidez al inicio del movimiento, que va mejorando conforme nos movemos. En las siguientes líneas trataremos de explicar cómo actuar con Fisioterapia en artrosis.
El dolor que suele producir la artrosis hace que la persona que la sufre comience a reducir su movimiento, lo que se traduce en una reducciónde la masa muscular y de la fuerza. Pese a que al acudir al/a la Fisioterapeuta podamos pensar que lo que más nos va a aliviar es un tratamiento pasivo (masajes, corrientes, etc…), lo cierto es que debemos conjugar siempre este tipo de terapias con ejercicio terapéutico, es decir, movimiento activo, para tratar de reducir la sintomatología y mejorar la calidad de vida de los pacientes (2). Es probable, que la depresión y la desesperanza asociadas hagan necesario el tratamiento de Psicología.
¿Qué ejercicios te va a recomendar tu fisioterapeuta en artrosis?
Durante la exploración, tu fisioterapeuta evaluará tu rango de movimiento articular, tu fuerza y un registro de las articulaciones afectadas, así como una medición del dolor. Una vez hecho esto, procederá a establecer un plan de ejercicios que te enseñará y que practicaréis para confirmar que su ejecución es óptima. Es importante que los hagas, son «tu medicación» y debes realizarlos con la frecuencia y la intensidad que te hayan indicado.
1.- Ejercicios realizados con tu propio peso.
Por ejemplo, las sentadillas o las zancadas, pueden ayudar a mejorar la fuerza de las piernas y a reducir el dolor asociado en las artrosis de cadera o de rodilla. Es importante que atiendas a las recomendaciones en cuanto al número de repeticiones, al ángulo que debe alcanzar cada articulación sobre su realización y al tiempo que hay que mantenerse en una postura determinada cuando se trabaja en isometría.
2.- Ejercicios contra resistencia.
Estos ejercicios pueden ser llevados a cabo con material muy fácil de conseguir, como bandas elásticas o correas lastradas que podemos obtener en cualquier tienda deportiva (si nos lo permites, haz uso del comercio de barrio. Todo lo que les encargues te lo traerán en un breve periodo de tiempo).
Las únicas recomendaciones en este tipo de ejercicios es no emocionarse con las resistencias. Sigue los consejos de tu fisioterapeuta y espera a que te indique que puedes aumentar las cargas, recuerda que esto es un tratamiento, aunque tú tengas que realizar los ejercicios en casa.
3.- Ejercicios pliométricos.
Los ejercicios pliométricos están diseñados para que los músculos efectúen la máxima potencia y fuerza en un momento determinado. Por ejemplo, un ejercicio de pliometría son los saltos al cajón, aunque tranquila/o, no vamos a pedir que empieces realizando saltos al cajón. Si tienen que llegar, ya llegarán. Adecuemos a cada persona la demanda de ejercicios, no al revés.
4.- Ejercicios de propiocepción.
En las articulaciones se encuentran receptores de la posición del cuerpo, por lo que deberemos entrenar el equilibrio y la postura para mejorar la efectividad de esos receptores. Incluso haremos uso de herramientas o videojuegos que puedas tener en casa, como la wii, aquella consola que estuvo tan de moda yque pronto abandonamos.
En definitiva, que vas a tener que plantearte que vas a hacer ejercicio terapéutico, por lo que es muy posible que tu sesión sea más parecida a una sesión de Fisioterapia Deportiva que a un agradable masaje o a un tratamiento de terapia manual.
Esperamos que te haya gustado esta entrada y recuerda que estamos a tu disposición para resolver cualquier duda. Puedes consultarnos por teléfono, en el 696996672, o bien en nuestro centro en Valencia, entre La Petxina, Juan Llorens, Ángel Guimerà y Gran Vía Fernando el católico. Estaremos encantados de resolver tus dudas.
Bibliografía.